Ecomuseos industriales en Europa

Una de las formas más extendidas en los últimos años para la preservación, conservación y puesta en valor del patrimonio industrial se realiza a través de los ecomuseos, un concepto que va más allá del de museo tradicional y que básicamente se conforma como un centro museístico centrado sobre la identidad de un territorio y sustentado en la participación activa de los habitantes de la zona.

Debido a sus características, los ecomuseos permiten recuperar espacios industriales abandonados y preservar la historia de la región y de sus habitantes. Pueden constituirse en una estrategia muy interesante para aquellos espacios que están sufriendo procesos de degradación y estancamiento, producto de crisis socioeconómicas. Además, estos lugares, se convierten en potenciales dinamizadores de la actividad turística, posibilitando el desarrollo o expansión de la misma.
Desde 1971, año en que fue introducido este nuevo concepto de museo, los ecomuseos se han extendido por todo el mundo, pero ha sido Europa donde han tenido mayor acogida, ya que dispone de grandes núcleos industriales y la población se encuentra predispuesta a colaborar en la defensa de su patrimonio.

FRANCIA

Este ecomuseo posee unos extraordinarios fondos documentales centrados en la historia industrial de Le Creusot entre 1782 y 1985

Es interesante destacar el caso de Le Creusot, situado en Francia, en la región de la Borgoña. En esa población se encuentra el Palacio de la Verrerie, antigua manufactura de cristal de la reina María Antonieta, y posteriormente la residencia de una familia de magnates de la forja. En la actualidad acoge el Museo del Hombre y la Industria y exposiciones relacionadas con la epopeya industrial de Le Creusot. Las dos torres cónicas son los antiguos hornos transformados: uno en teatro y el otro en sala de exposiciones temporales dependiente de la galería de arte municipal.

El Pabellón de la Industria, inaugurado en 2015 y acondicionado en la sala del juego de pelota del castillo, depende de la Academia Francois-Bourdon, así llamada en honor al inventor del martillo pilón a vapor. Esta institución posee unos extraordinarios fondos documentales centrados en la historia industrial de Le Creusot entre 1782 y 1985. El recorrido, dividido en cinco áreas, repasa la evolución de la siderurgia y la mecánica en Le Creusot, sin dejar de lado las tecnologías actuales.

ALEMANIA

En el Museo de Ferrocarriles de Bochum-Dahlhausen se organizan transportes de pasajeros en trenes históricos

En Alemania se encuentra el importante complejo de Bochum, ciudad situada al oeste del país perteneciente al estado federado de Renania del Norte. Allí se pueden visitar el Museo Alemán de Minería, considerado como el museo de tecnología minera más importante del mundo.

Esta ciudad cuenta con un gran número de museos, entre los que destacan el Museo de Ferrocarriles de Bochum-Dahlhausen, donde además de admirar su espectacular colección de trenes, se organizan transportes de pasajeros en trenes históricos; el Zeiss Planetarium, que cuenta con un amplio programa de música, espectáculos, actividades infantiles y exposiciones; y el Telefonmuseum, museo interactivo fundado en 1996 con una amplia exposición de aparatos de telecomunicación históricos.

INGLATERRA

En el centro de Inglaterra, cerca de la ciudad de Birmingham se encuentra el condado de Shropshire. Allí se puede visitar el complejo industrial de Ironbridge, lugar considerado como la cuna de la revolución industrial. Este interesante ecomuseo está gestionado por la Ironbridge Gorge Museum Trust, organización benéfica de patrimonio industrial que abarca diez museos y más de treinta sitios históricos. Se estableció en 1968 para preservar e interpretar el lugar donde se construyó en el siglo XVIII el primer puente de hierro del mundo.

Cerca de la ciudad inglesa de Birmingham se encuentra el condado de Shropshire, donde se encuentra el complejo industrial de Ironbridge, cuna de la Revolución Industrial

Hoy se ha conseguido hacer de él un gran atractivo turístico, con un itinerario que pasa por el Museo del Hierro de Coalbrookdale, donde se ubica un horno Darby, que usó una tecnología innovadora para fundir hierro con coque, con el que se construyó el puente.

Durante el trayecto se visitan las restauradas casas de la familia Darby y la ciudad victoriana Blists Hill, con tiendas, fábricas, escuelas y el personal disfrazado con trajes de época. El itinerario continúa hasta llegar al puente construido sobre el río Severn en 1779, que mide 30 metros de altura. Además, se atraviesa el Túnel del Alquitrán, observando como aún rezuma por las paredes el betún natural y se visita el Enginuity, centro de diseño interactivo, y otros museos sobre cerámica, artesanía, azulejos.

Gracias a estos y otros casos se puede afirmar que en las últimas décadas ha aumentado el interés por la preservación y conservación del patrimonio industrial, entendiéndose como un nuevo modelo de desarrollo local que ayuda a superar períodos de recesión económica consecuencia de la desaparición de las actividades productivas tradicionales y de su no-sustitución.

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